Warmisunqu's Austen

Personajes que nos evocan a Jane Austen
Pasión y Virtud de Bali Rosenqvist

La historia tiene dos grandes momentos que están separados por intrigas y secretos sin desvelar, cuando llega el desenlace y parece que la historia llega a su fin, surgen otras incomprensiones entre los personajes, que te deja 'vuelta a empezar', manteniendo la llama del interés vivo para continuar pegado a la línea de la historia.

Con un estilo sobrio y personajes que nos llevan a la época de la Regencia dejando un buen sabor de boca y una sonrisa en los labios, la autora nos pone frente a una historia con una trama atractiva y sabe captar el interés casi inmediatamente, no solo por los personajes que tienen un aire a los personajes de Jane Austen sino también porque tienen ese halo de intriga que envuelve el desarrollo de los hechos.

Hay un momento en que me siento perdida sobre la época en que se desarrolla la novela, uno intuye que es en la Regencia por lo que he mencionado antes, personajes que nos evocan a Jane Austen y casi lo pongo como un punto negativo, pero revisando el principio de la historia, la autora habla del reinado de Jorge IV y nos pone ante la evidencia que efectivamente es el período de Austen.

Algo que me llamó la atención de esta novela fue la sutileza con que manejaba cada letra escrita y había que estar muy pendiente para no perder pequeños detalles de lo que dijo tal o cual personaje para que más adelante encajara con el desenlace de la intriga.
En esta historia de romance las situaciones que se entretejen, constantemente descubriendo lo que oculta el comportamiento de algunos personajes, mezclado con ese juego de ser y no ser lo que que muestran hacia los demás, resulta inquietante. Es muy ingenioso cómo la autora juega con las virtudes y defectos de sus personalidades para mantenernos en vilo.

Hay otros temas tocados en esta historia como: la situación tan inestable de los patronazgos -que si cambia de dueño cambian de vicario y el anterior si no es familia o amigo, le toca buscarse la vida o encontrar otra rectoría-. La situación de los hijos bastardos (suena feo dicho así, pero así eran llamados) que tenían que pagar por los errores de sus padres, siendo su posición muy menospreciada. La vinculación de las propiedades a solo varones y si no nacía uno, la hija tenía que irse y buscarse la vida o casarse con el que heredaba, si a él le apetecía. Era constante la lucha de la mujer, para casarse con un hombre más por la conveniencia de asegurarse un futuro propio y de los suyos que pensar en el amor como único motivo de unir su vida a otra persona. Los matrimonios arreglados donde la mujer, por supuesto, no tenía voto, solo podía aceptar en silencio.

En definitiva nos encontramos con personajes complejos y profundos en sus acciones que te robarán el corazón con un final abierto, diálogos originales, ingeniosos, sobrios y un halo de sutileza que te cautivarán y mantendrán con el interés hasta el final de la historia.

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